sábado, 20 de octubre de 2007

Warland part 2

Doloridos, asustados, andrajosos.
Parecíamos un comando de vagabundos. Greñas, barbas, capas y capas de ropa sucia y rota, armas oxidadas y mugrientas.
Pero silenciosos.
El miedo hace que puedas moverte con un silencio increible. Una agilidad que nunca creerías tener. Porque una parte primaria de tu cerebro sabe que si haces ruido morirás, y pone tu cuerpo al límite.
Ya casi podiamos oler el hedor de esos bastardos por encima del nuestro propio, reptando entre muros, esquinas y ruinas.
Ellos eran mas, pero estaban confiados. Ruidosos y descarados celebraban seguir vivos y ser los "bastardos mas locos del lugar". No tuvieron ninguna oportunidad.
Es una estupidez disparar desde puntos opuestos por el riesgo a disparar a un amigo, pero en este caso estabamos desesperados. Solo podíamos dar un golpe brutal y definitivo para evitar que contraatacaran.
Mientras saqueabamos sus cuerpos no pude evitar fijarme algo que llevaba reconcomiendome desde que empezamos a seguirles:
Ninguno de ellos tendría mas de 15 años.

2 comentarios:

Unknown dijo...

armas por todos lados? dia de la "raptura"? americanoooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo

Anónimo dijo...

tio tienes una labia excepcional, lastima que solo la uses para decir sandeces. Un saludito.